Heroínas: Isabel Castro
En una sociedad y en una democracia, el honor es fundamental. En una universidad, también lo es. El Consejo de Honor de la Universidad de Monterrey, organismo que fomenta, procura y vigila el Código de Honor de la UDEM, apuesta por la transformación hacia una sociedad que valore la integridad y la vea como un objetivo alcanzable. Básicamente, es el que analiza las deshonestidades académicas de la comunidad y toma una decisión.
Isabel busca mejorar la práctica médica en México y promover la empatía en caso de una falta. No se queda conforme y cada día se esfuerza por cambiar la percepción de los valores, perseverando con cada paciente y a pesar del camino complicado que pueda encontrar. Desde niña, está interesada en estos acuerdos humanos, por lo que, al llegar a la UDEM, se unió a los Embajadores de la Integridad en donde creció hasta convertirse en presidenta. Poco tiempo después, se consolidó el Consejo de Honor y decidió ser miembro de este grupo.
Se considera alguien respetuosa, cualidad que utiliza cuando tiene que lidiar con diferentes ideas y que le ayuda a ser tolerante. Quiere trascender en el inmenso universo de la medicina como una profesional integral que encuentre la respuesta para resolver los males actuales, siempre con un sentido humano.