Innovadores que nos sorprenderán

Este año es muy probable que escuches más de estos visionarios que se imaginan un futuro con huevos sin pollos, nuevas soluciones para el cyberbullying y modos alternos de transporte tras la pandemia, entre otros.

¿Huevos sin pollo?

Como buen mexicoamericano, Arturo Elizondo desayunaba diario dos huevos. Cuando se dio cuenta del impacto ambiental que la producción de esta proteína animal genera en el ambiente, quiso encontrar una manera sustentable para minimizar el daño. Así ayudó a fundar Clara Foods con la misión de quitar la parte animal de estas proteínas, la cual reemplazo usando levadura y azúcar en un proceso similar al destilado de la cerveza. Llevan seis años en este proceso, y finalmente este año lanzarán el resultado.

Todopoderosa
Gitanjali Rao tiene 15 años, pero su corta edad no la limita en pensar en soluciones a los problemas actuales. Tiene 3 proyectos que pueden cambiar al mundo: Tethys, un sensor y app para detectar agua apta para consumo humano; Epione, un sistema para detectar posibles adictos a opioides y Kindly, una aplicación de I.A. que detecta y busca modificar mensajes groseros para combatir el cyberbulling. Su trabajo la llevo a ser nombrada en 2020 como TIME’s Kid of The Year.

Transporte consciente
Andrea Ponti es un diseñador que se preocupa por nuestro movimiento en el futuro cercano. Pensando en que la gente optó por usar más sus propios coches que el transporte público debido a la pandemia, tomó el tiempo en casa para pensar en un nuevo tren que sea eficiente, accesible y seguro para Hong Kong, donde vive.

Bajo el nombre de Island, es un tren eléctrico autónomo que no necesita un chofer y es amigable con el ambiente. En vez de tener filas de asientos, estos están acomodados en círculos, o islas, para que los pasajeros no estén sentados uno enfrente del otro. Esto los protege mejor de enfermedades además de darles una amplia vista de la ciudad. Actualmente, está en prototipos y este año espera pasar las pruebas para hacerlo una realidad.

Barcos sin capitán
En abril de este año empezará la travesía del MayFlower Autonomous Ship desde Inglaterra hasta Estados Unidos. Y su única conexión con Thanksgiving es la ruta, ya que la intención es mostrar el avance náutico actual en un viaje transatlántico. Brett Phaneuf es parte clave del ingenio de este proyecto, es uno de los co-fundadores y co-director que logró la colaboración junto con IBM y ProMare para desarrollarlo.

El barco tiene inteligencia artificial que permite que viaje sin asistencia por el océano, con lo que esperan revolucionar la investigación del mar, ya que esperan poder usarlo, si es exitoso, para hacer exploraciones más eficientes sin tener que estar abordo de un barco. También uno de los objetivos de este viaje es poder conseguir muestras de agua que les permitan investigar mejor sobre la distribución de los microplásticos en el mar.

Mejorar la vida de los estudiantes
Preocupada por el trauma que un estudiante joven puede tener por situaciones de violencia, racismo o pobreza y que puede pasar desapercibido, Samantha Pratt creó este proyecto para una experiencia positiva en la escuela.

Pratt es la CEO y fundadora de KlickEngage, una app que permite que los estudiantes reporten su estado mental diario y les ofrece mecanismos de auto-ayuda para lidiar con este, pero la mejor parte es que a la vez avisa a sus profesores para que puedan apoyarlos con la carga emocional que puedan tener.

Esta idea nació de su propio aprendizaje como profesora, en donde notó que, si la experiencia personal en la escuela era positiva, ayudaba a formar estudiantes exitosos, que evitaba que abandonaran la escuela y que rompieran este ciclo de trauma y pobreza. Al ser accesible de forma remota, como la educación lo fue el año pasado, su plan es lograr que llegue a más salones de clase para ayudar a estudiantes de todo el mundo.

Las casas que necesitamos
Jing Liu y Florian Lindenburg son una pareja de arquitectos que estaba a la mitad de diseñar un edificio residencial en Brooklyn, Nueva York, cuando empezó la pandemia. Encerrados con sus dos hijas, obtuvieron una nueva perspectiva, como nos pasó a todos, de que los hogares se transformaron en un todo en uno: oficinas, escuelas, gimnasios, restaurantes, etc.

Este cambio en que necesitaría un hogar para beneficiar el estado mental y emocional de sus residentes, cambió la visión de Jing y Florian sobre lo que realmente necesitaría este nuevo diseño. La propuesta se convirtió en un espacio multifuncional y cómodo para los residentes con ideas como recámaras en rincones opuestos para evitar distracciones y ruido al igual que espacios exteriores en cada departamento.

Ellos creen que el futuro de la arquitectura es crear espacios que estén preparados para pandemias, que eviten tendencias y sean duraderos. El estreno del edificio será en 2022.

Jing Liu y Florian Idenburg

El domador de mosquitos
A los 12 años, el diseñador industrial Kennyjie contrajó dengue por el piquete de un mosquito. Afortunadamente, sobrevivió gracias al cuidado que pudo recibir en un hospital, pero lo hizo darse cuenta que no es así para todos. Por eso creó Quito, una innovadora jaula que usa una reacción química para producir dióxido de carbono y un aroma humano artificial para atraer y succionar mosquitos. Su idea busca ayudar a la población local a prevenir eficientemente epidemias de enfermedades como el dengue, especialmente en resorts tropicales, donde es más fácil que afecten a turistas y se salga de control. Además, quieres que su innovación se adapte a las costumbres de cada lugar donde pueda usarse, respetando el contexto. Actualmente ha logrado que se use en Bali y aldeas cercanas pero espera poder llegar a todo el mundo en cuanto se pueda viajar de nuevo.

Fuente: Smithsonian Magazine.