
Estas películas definieron el género del terror
Por: Abril Garza, Coordinadora del Departamento de Diseño y Multimedia
No cualquiera se atreve a adentrarse en el mundo del terror o suspenso. Lo cierto es que se acerca la época en donde ese contenido está por todas partes y es inevitable verlo o hablar de él. Desde muñecos diabólicos hasta zombies, el pánico nos acompañará hasta en nuestros sueños.
El terror, como un género cinematográfico más, se disfruta de una manera particular. ¿Por qué nos gusta asustarnos?, ¿por qué nos decepciona tanto que la película no sea suficientemente temible? Nos gusta estar al filo, a la orilla de todo, y caer es asustarnos, sentir algo fuera de lo normal, canalizar nuestras ansiedades a través de diferentes tramas horroríficas.
Por otra parte, las proyecciones que podemos alcanzar consumiendo este tipo de filmes resultan también en momentos reflexivos; ¿por qué empatizamos con el monstruo en ocasiones? La criatura con rasgos humanos, nos recuerda tal vez a demonios con los cuales luchamos de manera interna, haciendo esto a veces más fácil de expresar o, en ocasiones, aún y más complicado.
Pero antes de psicoanalizarse, recordemos la ficción, ¿qué tan impresionados podemos estar para ya no querer volver a ver ninguna historia de terror proyectada en la pantalla?

Hay muchos relatos que de golpe nos emocionan, nos golpean tanto que preferimos ya nunca volver a recordar, pero en otras ocasiones, esa emoción es para regresar a verlas, o saber qué pasa después y, de hecho, disfrutarlas.
Aquí algunos de esos relatos tan amados como temidos (incluso odiados):
Nosferatu (1922) | Director: F. W. Murnau
¿Cine mudo? Es fascinante cómo tenemos diferentes opiniones de esta película, y es precisamente eso, ponemos nosotros mismos el guión, la trama está ahí y se nos presenta como una proyección de nuestro miedo. Algo a lo que tememos, algo que no podemos decir. Los sueños y pesadillas que están aún sin explicarse, y que probablemente nunca serán esclarecidos. Lo expresionista de Nosferatu, nos invita a apreciar este tipo de cine gótico como lo que es, algo artístico en su máxima expresión.
Y no dejemos de lado la icónica silueta de perfil del conde, algo de verdad inolvidable fuera de los vampiros comunes.
Psycho (1960) | Director: Alfred Hitchcock
Psycho es esa historia que en los sesenta era relevante, impactante y prohibida. ¿Por qué? La combinación de suspenso, terror, secretos familiares y delitos la hizo algo difícil de dejar de ver (y hacer remakes y spin-offs también). El juego mental que realiza Psycho, fue de lo más interactivo en aquella época. La muerte de la protagonista es algo que sale completamente de lo esperado en películas de este tipo. ¿Y el final feliz? No hay. ¿La escena de la ducha? Icónica.
Halloween (1978) | Director: John Carpenter
Lo desconocido y la incertidumbre aparecen en Halloween, pero no es la típica película que te provoca jumpscares cada segundo, hay una historia detrás que resulta profunda y triste que de hecho te invita a empatizar con Michael Myers. ¿Qué hace que le tengamos compasión? El abandono y rechazo que vive y vivió. El estar aislado invita a reflexionar si esto provocó que el personaje se construyera. Sin justificarlo, el sufrimiento que le fue causado, desafiará las opiniones de jóvenes y adultos. En la historia, Carpenter hace que la máscara blanca represente algo de lo que siempre queremos escapar… ¡y en Halloween!

Veneno para las hadas (1984) (de mis favoritas) | Director: Carlos Enrique Taboada
Niños y brujas, ¿te suena a alguna noche en que no pudiste dormir? La manipulación de Verónica sobre Flavia hace que la historia llegue a los puntos más sensibles de la mente del espectador. No es necesario que aparezcan fantasmas o monstruos en esta historia, la fantasía y la imaginación rompen límites infantiles y exploran mundos desconocidos profundos y oscuros, así, deja a un lado (sin olvidar) la ternura de la niñez convirtiendo todo en un escenario más perturbador.
Ringu (1998) | Director: Hideo Nakata
En la época en donde aún era relevante la renta de videos, apareció Ringu, que llevó el terror a lo cotidiano con una historia sobre una cinta maldita que mata en siete días a quien la ve. Su enfoque psicológico y silencioso convirtió a Sadako (o Samara en la versión de EUA) en un personaje icónico del miedo contemporáneo, marcando el inicio del terror japonés como fenómeno global.

¿Has visto alguna?, ¿consideras que el cine moderno hace terror que impacte? ¡Cuéntanos en nuestro IG @360udem!