Tips de estudio para iniciar el semestre
Por Jorge Torres Lozano, ExaUDEM (‘22) de la Licenciatura en Filosofía
El día de hoy quiero compartirte 5 métodos de estudio que en lo personal me sirvieron durante mis años de carrera. Te cuento: al ser egresado de la Licenciatura en Filosofía, leer era el pan de cada día. Por eso, desarrollé un método con el cual todos los días podía leer demasiado sin sentirlo tan cansado.
1. Divide lecturas entre académicas y no académicas. Estimular el hábito de la lectura constante te ayudará en extremo a la hora de tener que afrontar las lecturas de escuela. Por ello, para las lecturas académicas dedicaba 15 minutos al día, y para las no académicas dedicaba 20. Así, terminé leyendo 35 minutos al día; retenía más información y abarcaba diferentes temas por semana (ALERTA: Esto solamente aplica en materias muy teóricas y manteniendo una organización EXTREMA).
2. Aplica el método Pomodoro. Este se basa en estudiar o trabajar intensamente y sin interrupciones por 25 minutos y, posteriormente, darte un break de 5 minutos. Dicho modelo de trabajo me fue demasiado útil cuando realizaba trabajos finales o ensayos. Sin embargo, no lo recomiendo para tareas normales, ya que al no tener “tanta relevancia” en la ponderación, tendemos a no tomarlo en serio.
3. Estructura bien tus mañanas. La idea está en que cuando despiertes, (no importa la hora, mientras sean 3 horas antes de tu primera actividad) puedas dedicar 20 minutos al ejercicio físico y 20 minutos al mental, ya sea mediante lecturas o tareas. Así, tu cuerpo tomará energía y tu cerebro saldrá del reposo nocturno al ejercitarse con fuerza.
4. Ten noción del segundo cerebro. Te comparto algo que escuché un día y que es una idea sumamente obvia, pero que a alguien se le ocurrió renombrarla: toma apuntes. La noción del segundo cerebro es fungir como memoria externa, ya que, mientras pones un 90 % de tu atención en lo que ves o escuchas, el otro 10 % se reduce a tomar apuntes en otro lado. La novedad radica en aprender taquigrafía, una técnica de escritura que presume de poder escribir todo lo que uno oye a la misma velocidad que el que habla. Así lograrás anotar más en menos tiempo, y además, lo harás mediante códigos escritos que poca gente sabe.
5. Vuelve de tu procrastinación un método. Con esto me refiero a que, dentro de las posibilidades, date cuenta de que si dejas todo para el último, probablemente sea por costumbres o malos hábitos. A partir de ahí, intenta organizarte de manera que lo que dejes al último sean cosas que de antemano sabes que podrás realizar, y no cosas que te costarán una buena nota.
¡Espero que te sirvan estos consejos! Para acompañamiento y filosofía, cuenta con mi apoyo en cualquier cuestión académica. Me encuentras en Instagram como @filosoyorch.