¿Vasos de cebada? El futuro del bio-plástico en México
Ana Laborde sabe navegar más allá de los límites, conoce a profundidad el lema “si no existe, invéntalo” y le interesa más contestar una pregunta que detenerse a pensar si la respuesta es posible.
Estudió comercio internacional en la UDEM y es fundadora y directora de BioSolutions, la primera empresa en México en producir y ofrecer bio-plásticos (plásticos hechos de materia renovable y de fácil degradación).
Su misión era importar bio-plástico a México, pero descubrió la forma de producirlo con deshechos de la industria tequilera (bagazo de agave), y creó un proceso de producción sustentable en todas sus fases.
Unos años y muchos éxitos después, Heineken la buscó con una propuesta retadora: hacer bio-plásticos de la cebada. Así nacieron los vasos de cerveza que probablemente utilizaste en Pa’l Norte o en el Vive Latino (tenían la leyenda: “Hecho con cebada, como tu cerveza”).
El problema que atiende la empresa de Ana es muy real: el plástico se acumula –y para 2050 podría haber más plástico que peces en el agua–. Es por eso que ya producen popotes, plásticos, películas para empaques, materiales para macetas y decks de construcción, entre otros.Ana fue reconocida por el Massachusetts Institute of Technology (MIT) como una de las diez mujeres más innovadoras de México, la emprendedora del año en 2007 por la Grenoble Ecole de Management (GEM), y en el 2009 ganó el Premio DOMOS al Emprendimiento Verde. Obtuvo fondos del Conacyt y el Fondo Nuevo León para la Innovación (Fonlin). Su empresa obtuvo el tercer lugar en la Competencia Global de Emprendimiento del BizBarcelona.
Para Ana, lo más importante es tener curiosidad y observar. “Hay que tener los ojos abiertos y documentarse, hay muchas oportunidades de negocios en el mundo”. Cree firmemente que lo que estudies no define tu futuro, sino que te da herramientas para que puedas definirlo tú. El peor error, dice Ana, es no intentarlo… y así es como creó vasos de cebada.