“Más cubrebocas que medusas”: el futuro del océano
Y una vez más: bienvenidos al mundo basura. La ONG francesa Opération Mer Propre, que se encarga de recoger regularmente desechos a lo largo de la Costa Azul en Francia, empezó a advertir desde hace dos meses de hallazgos de “basura covid”: guantes, cubrebocas, botellas de gel antibacterial, entre otros.
Joffrey Peltier, de la ONG, comentó que no eran cantidades alarmantes o enormes; sin embargo, le preocupaba que esto fuera el inicio de un nuevo tipo de contaminación, una que se volvería ubicua después de que millones en todo el mundo recurrieron a plásticos de un solo uso para combatir el coronavirus.
“Es la promesa de la contaminación por venir si no se hace nada”, le dijo Peltier a The Guardian.
Su compañero Laurent Lombard fue más dramático (o realista): “Pronto correremos el riesgo de tener más cubrebocas que medusas en el Mediterráneo”. Y es que en Francia, el gobierno ordenó –sin chistar en las consecuencias– dos mil millones de máscaras desechables para evitar la propagación del coronavirus en el país.
Esta basura covid se suma a las monstruosas cantidades de basura que llegan a los océanos: previo a la pandemia, la oficina del medio ambiente de la ONU registró que, cada año, se tiran 13 millones de toneladas de plástico a los mares.
¿Cómo ser parte de la solución y no del problema en cuanto a la basura covid? De entrada, comprar un cubrebocas que puedas lavar y reutilizar (ya hay buenas opciones en el mercado); y en lugar de usar gel antibacterial o guantes desechables, sugerimos una opción que es más efectiva contra el combate al coronavirus: lavarse las manos constantemente.