Siri no nació para ayudarnos

Los hábitos de consumo están en constante cambio. La tecnología de 2020 prometida en películas de los ochenta parece que por fin aterrizó —salvo por los coches voladores de Volver al futuro II—, y controlar nuestro alrededor con comando de voz suena estupendo.

Para los usuarios, además de tener características beneficiosas, esta tecnología innovadora también tiene un lado sospechoso. Entre los competidores en el mercado, detectaron filtraciones de datos de usuarios y empezaron a aceitarse las máquinas de las teorías de conspiración, tan afines a nuestros tiempos convulsos.

¿Has escuchado alguna de estas teorías? Estas ideas fueron deducidas gracias a la observación de algunos usuarios.

Food for Hackers

Para muchos consumidores existen dos grandes preocupaciones: los asistentes en nuestros celulares o aparatos en casa siempre están escuchando y pueden actuar como enlace para conectarse a otros dispositivos, creando así puntos de acceso para un hacker. Quizá te preguntes si tu asistente virtual sabe demasiado, o si trata de recopilar tu información, tus comandos y almacenarlos en un servidor.

Agrégale todas las interacciones que realizas en internet: búsquedas en Google, emails, likes, online shopping. Es tanta la información que arrojas con el uso de aplicaciones que puede parecer que te espían. Pero lo más revelador está en las redes sociales. El algoritmo de estas puede concluir con certeza si eres soltero o casado, si tienes mascota, carro, cuál es tu comida favorita e incluso los intereses que no sabías que tenías. Gracias a esto, pueden crear una suposición sobre cuál será tu próxima compra antes de que lo sepas.

Cada captura de datos puede automatizar tus intereses e, incluso, te conocen más que tú mismo. Si hablaste con tu amiga sobre hacer spinning y al minuto apareció una publicidad de Spinspeed en tu feed, ¿crees que la grabación de audio, el análisis e interpretación de conversación fue escuchada? ¿Sería una forma eficiente de direccionar publicidad?

No tan rápido, máquina de teorías de conspiración. En el caso específico de Apple, esta empresa con sede en California repasa constantemente las configuraciones de privacidad. Al configurar Siri, se solicita al usuario decir algunas frases varias veces para crear un patrón de la voz del usuario.

Una vez realizado, hasta no producir una coincidencia en el patrón, no hay audio que se envíe a servidores de Apple a menos que se detecte un “Oye, Siri” previamente. Al decirlo, se utiliza un identificador aleatorio que no es tu Apple ID, ni tu nombre o dirección. Cuando Apple almacena tus datos personales, se utilizan sistemas informáticos con acceso limitado en instalaciones con medidas de seguridad físicas. Además, Apple compartió sus políticas de privacidad con el Reglamento General de Protección de Datos en la Unión Europea y se alinean con este requisito legal.

La mayoría de los usuarios que usan un smartphone cuentan con aplicaciones de uso gratuito en un 95 %… Pero, recuerda: nada es gratis. Toda aplicación que obtiene tus datos necesita recibir beneficios de alguna forma.

Detrás de cada app siempre hay un lado que se desconoce: codificación, algoritmos, trackers y más.

El tiempo en casa es valioso. Los asistentes virtuales automatizan y aceleran procesos domésticos. Los mejores ahorran tiempo y dinero para concentrarse en los momentos que más importan.

Sin embargo, esta inteligencia artificial no está para unirnos o crear conexiones, existe para fines comerciales.

Consejos para mantenerte seguro con un asistente virtual

Las quejas de los principales asistentes virtuales según usuarios:

¿Cuánto dinero?

¿Quién los tiene?

Cosas que puedes hacer con Siri (y probablemente no sabías)