Tu voz interna influye en tu salud mental

Por Carmen González, profesora UDEM de la Escuela de Psicología

El diálogo interno es un proceso mental que cada uno mantiene consigo mismo dentro de su cabeza. Se trata de una autoconversación por medio de la cual analizamos situaciones, consideramos perspectivas y tomamos decisiones. Por supuesto, también influye de forma directa en nuestra salud mental, ¿por qué? Muy sencillo, porque determina cómo nos percibimos a nosotros mismos, cómo vemos al resto de las personas y cómo interpretamos cada una de las situaciones que enfrentamos día con día.

Entrando un poco más en materia, a esto le podemos agregar declaraciones o afirmaciones positivas (el tema central el día de hoy). Estas son frases cortas que, si uno las repite, es posible reprogramar el pensamiento, las creencias y el diálogo interno negativo. De esta forma, la suma del diálogo interno y las afirmaciones positivas nos permitirán tener juicios y reflexiones más asertivas.

Expliquémoslo de otra manera. Imaginemos que una compañera de clase se enfrenta a varias situaciones estresantes que afectan su confianza, estado de ánimo y salud física. Además, se da cuenta que su diálogo interno negativo tiene un rol importante en cómo está enfrentando esos retos. Cansada de dicha situación, realiza un cambio; investiga qué puede hacer para transformar esta visión tan negativa que la hace sentir muy mal y descubre que lo que se dice a sí misma influye directamente en su actitud, en cómo se siente y también en su forma de superar los obstáculos.

Por lo tanto, comienza a imaginarse a sí misma superando cada reto, cumpliendo sus metas y disfrutando de la satisfacción que esto le provoca. A medida que este diálogo interno se va tornando más positivo, ella nota que su energía cambia; se siente motivada, activa y fuerte físicamente. Sus niveles de estrés disminuyen y aumenta su confianza.

Conforme los días pasan, la práctica de estas afirmaciones positivas aunadas a su diálogo interno positivo se convierten en sus más grandes aliados, recordándole constantemente su valor y fortalezas. De esta manera, se da cuenta que ahora, al enfrentar un nuevo desafío, de inmediato trae a su mente pensamientos de motivación y aliento, como “yo puedo hacer esto”, “tengo la capacidad de encontrar soluciones creativas”, “mi capacidad puede superar cualquier obstáculo”.

Es importante señalar que el diálogo interno no siempre es deliberado. En ocasiones nuestros pensamientos ocurren de manera automática y pueden resultar difíciles de controlar. Sin embargo, a través de la práctica de la atención plena y la meditación podemos reemplazar los pensamientos negativos con pensamientos positivos y constructivos que estén insertados en nuestro diálogo interno.

Los ejercicios diarios de afirmaciones positivas nos pueden ayudar a reemplazar los patrones de pensamientos negativos porque mejoran el diálogo interno. Provocan que logremos un bienestar emocional y podamos alcanzar metas y objetivos.

Uno de los autores más reconocidos en este tema es Norman Vicent Peale, quien en su libro El poder del pensamiento positivo, comparte afirmaciones clave, como “confía en ti mismo”, “encuentra poder en la paz”, “practica el silencio diariamente”, “llénate de energía”, “busca un propósito” o “cultiva la espiritualidad”.

¿Tú qué afirmaciones positivas te dices a ti mismo cuando enfrentas una situación estresante o un reto muy importante?