Así deberían ser las ciudades para resistir el cambio climático

Las ciudades de Chicago, Fukuoka, Rotterdam, Ahmedabad y Copenhage deben ser la fuente de inspiración de los arquitectos actuales. Estas cinco ciudades nos dan lecciones de cómo podemos equipar las estructuras y espacios para resistir a los efectos de climas extremos. En un reporte de Inverse, explican los problemas y soluciones que han encontrado para enfrentarlo. Toma nota.

Fukuoka, Japón

En esta ciudad lidian con calor extremo y riesgos de inundaciones por épocas de lluvia intensa.
Su soluciones fueron:
1) Crear más espacios urbanos verdes en techos que ayudan a regular la temperatura. El gobierno se dedicó a investigar qué áreas son las más calientes para poder adaptar cada espacio a las necesidades locales.
2) Plantar árboles y mantener parques que ayuden a absorber el agua en épocas de inundaciones.

Chicago, EUA

A pesar de ser considerada como una de las ciudades más vulnerables a los efectos del cambio climático, Chicago está en la lista. Las constantes inundaciones por la lluvia regular y el problema con el drenaje se convirtieron en la inspiración de medidas para controlarlas.

Sus propuestas para contrarrestarlo son:
1) El desarrollo de granjas verticales urbanas
2) Ser pioneros en crear infraestructuras verdes para recolección de aguas pluviales con sistemas de filtrado.
3) Invertir en pavimento que absorbe agua para reducir las inundaciones.

Rotterdam, Países Bajos

Otra ciudad que tiene problemas con el agua. Esta ciudad de puerto y más cerca del nivel del mar, es especialmente vulnerable.

Las formas de adaptarse incluyen:
1) Elevar los edificios y desarrollar “cuadras de agua” que puedan absorber la lluvia y ayudar a los sistemas de drenaje.
2) Crecer plantas alrededor de las vías de trenes para regular la temperatura y las inundaciones.

Ahmedabad, India

El clima extremo es común y en una población tan densa, incluso es mortal para los ciudadanos. Para protegerse, han optado por:
1) Crear “techos fríos”. Esta innovadora propuesta usa materiales ecológicos como desperdicios de papel y de coco que, junto con pintura blanca, ayudan a reflejar la luz solar de los edificios y mantenerlos frescos.

Copenhague, Dinamarca

Esta ciudad tiene el plan más ambicioso para contrarrestar los efectos. Su misión es que para el 2025 –o sea en menos de cinco años–, tener emisiones neutras de carbono a pesar de su población en crecimiento.
Para lograrlo, estas medidas se han implementado:
1) Bicis en vez de coches: el 49% de los viajes internos en la ciudad usan esta medida de transporte.
2) Ser eficientes en el uso de energía: el 98% del sistema de calentamiento de la ciudad se obtiene del calor residual de la producción de electricidad.
3) Un sistema de enfriamiento para el agua marina con el que han reducido 80 mil toneladas de dióxido de la atmósfera.